Hace siete años de un día como hoy, el mundo telenovelero lloraba la repentina y temprana muerte de Eduardo Palomo, quien perdía la vida tras sufrir un infarto al corazón mientras cenaba en un restaurante en Los Ángeles. Su muerte produjo una gran pérdida en el mundo de las Telenovelas. Sus impecables actuaciones en telenovelas como "Huracán" o "Corazón Salvaje" hicieron de él uno de los actores más queridos del género. Hoy hemos querido preparar este pequeño homenaje al actor que logró robarse el corazón de medio mundo.
Por siempre en nuestros corazones
Eduardo Palomo nació un 30 de mayo de 1962 en México. Pocos hubieran imaginado que aquel niño se convertiría en uno de los actores más queridos de las Telenovelas.
Con apenas tres años le dijo a su madre que quería ser artista. Estudió en el colegio de los padres benedictinos Vital Pax y fue allí donde tuvo su primer contacto con el mundo de la actuación al realizar numerosas obras de teatro. Su desparpajo y naturalidad hicieron que con 9 años le llamaran para realizar un anuncio publicitario. Tres años más tarde participó en el montaje “Los diez mandamientos” y en el musical “Mi dulce sueño”, en donde además de actuar cantaba y bailaba. A la edad de 13 años vivió la separación de sus padres y la desaparición de su padre, al que no vio hasta 16 años más tarde.
Mientras estudiaba en el instituto se apuntó a la escuela de actuación de Andrés Solar. Su primera gran oportunidad le llegó con la obra teatral “El diluvio que viene”, dirigida por Manolo Fábregas. Este trabajó le abrió muchas puertas e hizo que entrara a estudiar en la escuela de interpretación de Televisa.
En 1981 debutó en las Telenovelas con “Por amor” y, desde entonces, le siguieron numerosos títulos entre los que destacan: “Tal como somos”, “La casa al final de la calle”, producción que le concedió gran éxito, “La pícara soñadora” y “Alcanzar una estrella II”. Durante este tiempo se hizo miembro de la Iglesia de la Cienciología, donde halló una importante guía espiritual gracias a la cual pudo ayudar a muchas personas.
A pesar de haber participado en un sinfín de telenovelas, el verdadero éxito estaba por llegarle en 1993 con su protagónico en el exitoso melodrama “Corazón Salvaje”. Dicha telenovela marcó un hito en la historia del género e hizo de Eduardo uno de los actores más queridos y admirados por el público. Ese mismo año aprovechó para probar suerte en el mundo de la música y lanzó su primer y único disco: “Mover el tiempo”.
El 26 de noviembre del año 1994 fue un día muy importante para el actor ya que contrajo matrimonio con Carina después de cuatro años de relación. Tras esto, decidió alejarse por un tiempo del género. Regresó tres años después con la telenovela “Morir dos veces”, un melodrama muy especial pues compartió protagonismo con su mujer. En 1997 protagonizó al lado de Angélica Rivera el melodrama "Huracán". En 1998, el matrimonio cumplió el sueño de ser padres con el nacimiento de Fiona. Dos años más tarde nació Luca.
En el año 2000, y tras finalizar las grabaciones de “Ramona”, el actor deja su México y pone rumbo a Los Ángeles. Allí era apenas un desconocido pero logró hacerse un hueco en el difícil mercado estadounidense en el año 2002 tras participar en el cortometraje “Cojones” y protagonizar la película “El misterio del Trinidad”.
“Te aseguro, donde quiera que estés, que seguro que es aquí, que te amo, mi compañero hermoso. Ahora seguiré adelante por nuestros hijos”, dijo Carina, la mujer del actor, en el homenaje que le realizaron a su marido en el teatro San Rafael de México.
Desgraciadamente, y a pesar de tener en mente varios proyectos, el 6 de noviembre de 2003, un repentino ataque al corazón se lo llevó para siempre mientras cenaba en un restaurante de Los Ángeles.
A pesar de los años y de la distancia, no hemos podido olvidar a Eduardo Palomo. Él vivirá por siempre en cada uno de nuestros corazones porque logró algo que muy pocos actores han logrado: hacer historia. ¡No te olvidamos Eduardo Palomo!
Por: masquetelenovelas.blogspot.com
